Jóvenes: Queremos comprar casa pero no podemos.

Los jóvenes nos queremos independizar ya.

Actualmente los jóvenes en el país nos encontramos en una crisis respecto de la vivienda. Las personas de la generación de finales de los 80s, principios y mediados de los 90s, estamos en una difícil situación económica, los salarios no se ajustan a la exigencia que se requiere para independizarse de la familia, cada vez es más común que las parejas de jóvenes pospongan su independencia o sus matrimonios a la espera de poder mejorar su situación económica, e incluso, en el caso del matrimonio, algunos deciden realizar su vida en pareja en la casa de sus padres. 

Para dimensionar en una pequeña parte la situación usemos el ejemplo de una persona de 30 años que es abogada y notario; si trabaja en alguna firma o en alguna empresa grande puede aspirar, en el mejor de los casos, a un salario de entre 1,000 y 1,500 dólares más lo que pueda hacer en trabajos extras llegando tal vez a los 2,000 dólares. Estamos hablando de uno de los mejores casos en promedio, por supuesto que hay mejores, pero no son usuales, lo demás es de mal a peor.

En un país en el que sus inmuebles de habitación (los ubicados en zonas con mayor demanda por seguridad y "cercanía" [el famoso a 5 minutos de San Salvador]) tienen precios que oscilan entre los cien y ciento cincuenta mil dólares y sigamos sumando, será muy difícil para una persona con un salario como el del ejemplo (uno de los mejores escenarios posibles) poder hacer una compra de casa a ese nivel, por lo que la opción de independizarse se ve cuesta arriba. La siguiente opción es alquilar, pero aún así los precios son elevadísimos.

¿Por qué se da esto?

Que las casas que nos interesan sean tan caras, se debe a la excesiva centralización territorial de la vida económica y social del país. 

Un estudio de FUSADES señala esto como un problema regional, en el cual nuestro país da signos preocupantes, comparando a La Unión con territorios despoblados de la Amazonia, por ejemplo. La nota está publicada en este enlace: http://fusades.org/contenido/departamentos-de-el-salvador-con-preocupantes-rezagos-en-desarrollo.

San Salvador, Antiguo Cuscatlán, Nuevo Cuscatlán, Santa Tecla, Soyapango, Ilopango, Apopa y Mejicanos. La anterior lista detalla los municipios en los que centra la vida económica y social del país. Sobresalen únicamente dos departamentos: San Salvador y La Libertad.

El departamento de San Salvador y el departamento de La Libertad son los departamentos que abarcan la vida social y económica en el país en su mayor parte; específicamente en 4 municipios: Santa Tecla, Antiguo Cuscatlán, Nuevo Cuscatlán y San Salvador. En San Salvador están ubicados la mayoría de hospitales más grandes del país, si mencionamos a las universidades a San Salvador se le une Antiguo Cuscatlán con la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas y la Universidad Dr. José Matías Delgado, en el mismo sentido al referirnos a recreación San Salvador y Antiguo Cuscatlán, son los municipios que concentran una gran cantidad de plazas, centros comerciales, zonas de vida nocturna, recreación al aire libre planificada. Gran parte de las empresas más grandes del país se concentran en estos dos departamentos, lo que hace que la fuerza laboral apta para emplearse se vea atraída hacía esta zona; y la suma de todo esto provoca que sea la más cotizada para domiciliarse generando una altísima demanda que hace que los precios de casas y apartamentos queden fuera del alcance de los jóvenes salvadoreños en edad y con intenciones de independencia. 

Por otro lado tenemos otros municipios de San Salvador, como el caso de Soyapango, el cual es el municipio con mayor densidad poblacional del país, este municipio por lo mismo concentra colegios, universidades, empresas, centros comerciales y residenciales. Un problema de él y sus municipios hermanos es el estigma de inseguridad que les persigue, lo cual hace que no sean la primera opción o incluso, en algunos casos, que no sean ni opción para domiciliarse. 

Después tenemos los municipios de San Miguel y Santa Ana, que son las cabeceras departamentales que representan las ciudades más desarrolladas de las zona oriental y occidental respectivamente en el país, en teoría ellas son un ejemplo de lo que deberían ser las demás cabeceras de cada departamento del país, aunque a un mayor nivel.

En general, lo que hace atractivo para que una persona se domicilie en un determinado lugar del país son varios factores de domicilio determinantes, dentro de los cuales encontramos:

- Zona residencial cómoda.

- Hogar cómodo.

- Seguridad en general.

- Cercanía con el lugar de trabajo.

- Cercanía con servicios básicos como alimentación, salud, educación, etcétera (escuela, colegio, universidad, hospitales, mercado, supermercado.)

- Oferta de consumo y entretenimiento cercana y variada.

- Sensación de cercanía a la ciudad y vida social.

- Sensación de mayores probabilidades de prosperar económicamente.

Seguramente hay más o llamadas de otra forma, pero desde mi punto de vista considero que estas son las principales. 

No todos los municipios ofrecen estos factores de domicilio, lo que hace que las personas que viven y también las que no, se vean atraídas/obligadas a permanecer o a mudarse a estos municipios para buscar el desarrollo de su proyecto personal. Difícilmente considerarán dejarlos para migrar hacía otro departamento, o en el caso que vivan en otros municipios, opten por quedarse en el que ya están.

Refiriéndonos exclusivamente a la población joven del país seguramente una gran parte toma en cuenta todos o la mayoría de los factores de domicilio, y esto hace que no sea viable la opción de migrar hacia otros municipios del país que no sean Santa Tecla, San Salvador, Antiguo Cuscatlán y Nuevo Cuscatlán, generándose así el problema de la excesiva demanda de vivienda y empleo en una misma zona para todo un país, coadyuvando a mermar el desarrollo en las zonas restantes.

¿Cómo solucionamos este problema?

Un primer paso es sacando la economía y la vida social de una parte exclusiva de la zona central hacia otros departamentos del país.

No creo tener la panacea a este problema, pero si una propuesta que puede ser parte de la solución para iniciar el proceso de salida de la vida económica. 

La solución consiste en implementar una estrategia de salida por etapas, a través de la cual se buscarán crear o potenciar los factores de domicilio en los diferentes municipios para que las personas los tomen como opción domiciliarse en ellos.

Comencemos:

1. Las empresas: empresas nacionales e internacionales deben comenzar a instalarse en las cabeceras departamentales de los 14 departamentos con la idea de comenzar a generar oportunidades laborales en todo el país. Para que esto suceda se puede iniciar un plan de incentivos y facilidades, como por ejemplo dar beneficios fiscales o administrativos a empresas que establezcan su base de operaciones en cabeceras departamentales. (Con esto surge otro problema, el de la planificación urbana, debe tomarse en serio la planificación y se deben separar las zonas comerciales de las de vivienda, además de otros problemas más en los que estamos fallando por no planificar adecuadamente.)

2. La educación: las empresas requerirán empleados cualificados para contratar. La primera parte consiste en que el Estado invierta, facilite e incentive la educación en todo nivel de sus ciudadanos, por lo que restaurará y acondicionará de forma digna y efectiva centros escolares e institutos educativos, establecerá campus universitarios de la UES y facilitará la instalación de campus universitarios privados en las diferentes cabeceras departamentales. La idea es que esto ayude con la salida económica y social de la zona central, ya que personas que la habitan verán la oportunidad de emplearse y esto hará que se comiencen a movilizar a otras zonas del país, de igual forma las personas que ya habitan en estas zonas tendrán opciones para desarrollar su plan de vida personal en el municipio que ya residen.

3. La vivienda: una vez iniciado el despliegue de la fuerza laboral a las zonas establecidas, la demanda de vivienda iniciará a crecer en ellas, esto hará que la demanda en la parte central disminuya y comience a aumentar en otras zonas del país por medio de las cabeceras departamentales.

Una vez esto se implemente inicia la segunda parte del plan, la cobertura de la demanda a los factores de domicilio relacionados a los servicios básicos de entretenimiento y la vida social de las personas, que son sumamente importantes y necesarios para cubrir en totalidad la satisfacción y plenitud de las personas.

4. Entretenimiento, consumo y vida social:  

En este caso el plan es bastante ambicioso, pero creo que es viable por esto: el hecho de que la vida social y de entretenimiento se encuentre tan centralizada en un solo lugar la hace monótona, predecible, repetitiva y otros malos adjetivos. Es decir, siempre es lo mismo a la hora de buscar opciones para entretenerse, ya sabemos que hay al norte, al sur, al este y al oeste de nuestra zona de movimiento, pero como no hay más, toca acoplarse. 

Hay ejemplos para demostrar que esto es cierto: en el principio de su lanzamiento, El Paseo El Carmen en Santa Tecla, fue una explosión para las personas, debido a que su concepto se diferenció al resto de los centros comerciales ubicados en su misma zona de influencia, lo mismo en el caso de El Parque Cuscatlán ubicado sobre la alameda Roosevelt y la 25 avenida sur de San Salvador, en este caso un lugar totalmente fuera del concepto consumista al que estamos acostumbrados. Lo mismo sucede cuando se inauguran nuevos centros de consumo cerrado en la capital o sus alrededores, las personas se ven atraídos a ellos por significar algo "nuevo" aunque no tengan ningún tipo de novedad o no se diferencien de forma marcada del resto.

Dicho lo anterior, podemos proceder a explicar el plan.

El plan consiste en la creación de mini-ciudades sumamente vistosas en cada zona del país, estas mini-ciudades serán una combinación entre Ciudad Cayalá (de Ciudad de Guatemala) el Paseo El Carmen/Parque Cuscatlán y del Bicentenario, el "Centro de Estilo de Vida La Gran Vía" y la ciudad en general:

Imagen: Wikipedia.

A continuación explicó la relación que cada lugar tendrá en estas mini-ciudades:

Ciudad Cayalá: Se debe aplicar el diseño de esta ciudad al de las mini-ciudades. Su arquitectura es sumamente atractiva y novedosa para lo que estamos acostumbrados a ver en el país, definitivamente un lugar con ese concepto de construcción será uno a tomar en cuenta seriamente para pasar las horas con cualquier pretexto. 

Paseo El Carmen / Parque Cuscatlán y del Bicentenario: cafés, restaurantes, terrazas, ventas de chucherías, espacios para pasear en bicicleta, caminar, contemplar, leer, meditar o simplemente para estar.

La Gran Vía: similar concepto de ubicación de locales de venta al aire libre, siendo estos de vestimenta, tecnología, libros y cualquier otro tipo de producto. El concepto "al aire libre" que utiliza este centro de consumo es sumamente atractivo y exitoso, lo podemos comprobar con la Ciudad Cayalá y El Paseo El Carmen también.

La ciudad en general: espacios de entretenimiento diurno como museos, galerías de arte, teatro al aire libre, entre otros. También zona enfocada en lugares para diversión nocturna, como bares y discotecas. 

Todo esto se concentraría totalmente en la miniciudad.

Aplicación:

Se debe analizar su factibilidad, y diferenciar estilos por zona si es necesario. Se pueden ubicar en lugares como Chalatenango, Santa Ana, Ahuachapán, San Vicente, San Miguel y Usulután. 

Se puede mezclar y aprovechar con las zonas turísticas de los lugares mencionados; zona alta de Chalatenango, laguna de Apastepeque en San Vicente, Lago de Ouija en Santa Ana, Ataco, Juayua y Apaneca en Sonsonate y Ahuachapán, Ilobasco en Cabañas, Laguna de Alegría, Puerto El Triunfo, Bahía de Jiquilisco en Usulután. Y así para cada cabecera departamental o incluso se podría ubicar una por zonas (occidental, central, paracentral y oriental) para que sean estas las que reciban a las personas que viven en dichas zonas.

Una vez se de esto, la planificación urbana debe ir enfocada a aprovechar los espacios, en aumentarlos y en construir el país con una estructura vanguardista, amigable con el medio ambiente, y lo más importante: planificada, sostenible y con sentido.

Cuando hablo sobre empresas, educación y vivienda me refiero a puntos separados de un plan que se debe desarrollar de forma integral y coordinada, que además es obligación que se planifique y realice de la mano de las personas especializadas en esos temas. 

Siendo yo experto en nada, pretendo únicamente exponer las líneas lógicas y evidentes sobre las cuales creo se puede comenzar a trabajar para solucionar este gran problema.

Los jóvenes tenemos que comenzar a construir un país distinto al que nos dejaron.

¡Que empiece el dialogo!

Erick Flamenco.